domingo, 4 de julio de 2010

Las luces de la calle

El apartamento llevaba abandonado algunos años. Todas las ventanas estaban abiertas y algunos papeles y periódicos se movían por el suelo. Cerré la puerta y observé los muros de ladrillo, el polvo en el suelo, las luces de la calle proyectadas en el techo...
Cogí un diario en la esquina más distante que encontré. Estaba rasgado y cubierto de polvo, y un titular afirmaba que se había encontrado el cuerpo de un rehén soviético al que secuestraron en Beirut. En otro, leí a pie de página algo así: "Se inaugura la Pirámide del Louvre". Fui encontrando periódicos, notas y cientos de dibujos sin sentido; unos con colores fríos, los más en blanco y negro. No quise quedarme a averiguar: decidí deshacerme de la mayor parte de aquello tirándolo por una de las ventanas, lo que dejó al descubierto varios nidos de cucarachas y un agujero en la pared.
Me acosté en un viejo colchón y pensé en las reformas que tendría que hacer. Habría que comprar una mesa y una silla, tal vez una estantería pequeña y algunos libros en blanco. Y después de mucho meditarlo, decidí al fin que sí: en aquella esquina quedaría bien una lámpara de pie para no depender de las luces de la calle.

6 comentarios:

  1. Todos los comienzos son difíciles... Eso sí, lo de tirar las cosas por la ventana... Nonono, eso no está bien XD Besito!!!!

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  2. A veces hay que tirar algunas cosas para poder guardar otras nuevas.

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  3. Pero como dé a alguien se te puede caer el pelo por Responsabilidad Civil... XD (Deformación profesional, ya sabes...XD).

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  4. por las ventanas se tiran cajas fuertes y pianos. De papeles nada, que ensucian...

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  5. (neveras no, que esas caen de los árboles)

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